Casa do Outeiro es una propiedad rústica de 200 años de antigüedad que data de 1823, completamente reformada y modernizada en 2023. Goza de una ubicación privilegiada, combinando la tranquilidad de la vida en el campo con la proximidad de centros urbanos como Vila do Conde, Maia, Matosinhos y Porto.
Es una propiedad amurallada, totalmente independiente, que consta de una villa con 3 dormitorios, 2 baños, una cocina totalmente equipada con chimenea ancestral y ahumadero, un comedor, una sala de estar, una sala de audiovisuales con sofá cama de 2 plazas, una sala con billar, un patio empedrado con mesa de picnic y parrilla y una era con mesa de jardín.
Se encuentra a unos 9,9 km del aeropuerto de Oporto - Francisco Sá Carneiro, a 8,8 km de la playa más cercana y a 6,2 km del hipermercado más próximo. Con aire acondicionado en los dormitorios y en el comedor, está certificado energéticamente con la clase B- por el sistema de Certificación Energética de Edificios. Ofrece acceso gratuito a Internet, con velocidades de hasta 1000 Mbps, a través de WiFi 6 o tomas Rj45 y cargadores de gadgets USB en todas las habitaciones. Equipado con 2 pantallas planas de 55 y 65 pulgadas con acceso gratuito a los canales Eleven Sport, HBO Max y Amazon Prime.
En la bodega encontrarás vinos representativos de algunas regiones vinícolas portuguesas, por un suplemento.
Encontrarás una cocina totalmente equipada que incluye lavadora y secadora, lavavajillas, horno y microondas, cafetera, tostadora y hervidor de agua. Los cuartos de baño están equipados con toalleros eléctricos y secador de pelo. También hay plancha. A 60 m hay un pequeño minimercado del pueblo, donde se pueden comprar pequeñas provisiones y productos tradicionales.
comprar pequeñas provisiones y productos tradicionales. Se ofrecen comidas ocasionales previa petición y según disponibilidad.
disponibilidad. Se trata de un espacio totalmente independiente, ideal para disfrutar de unas tranquilas vacaciones en familia o con amigos. Tenga en cuenta que no se permite fumar dentro de la casa, ni tampoco animales de compañía, y que deben respetarse las normas de buena vecindad, especialmente en lo que se refiere al ruido en las horas de descanso. Hay que tener en cuenta que el acceso peatonal se realiza a través de caminos empedrados irregulares y que el edificio limita al sur con una carretera, lo que conlleva el riesgo de algún ruido ocasional.
